Ingredientes:
2 huevos no muy pequeños
50 ml. de aceite de oliva
suave (más o menos 50 grs.)
50 ml. de anís (más o menos 50 grs.)
130 grs. de azúcar
420 grs. de harina
1 sobre de levadura en
polvo.
Aceite para freír
Con estas cantidades salen unas treinta rosquillas de un tamaño medio.
En un cuenco ponemos los huevos con el azúcar, añadimos el anís, el aceite y por último la harina con la levadura. Mezclamos bien, hacemos una bola con las manos, cubrimos con un film y dejamos reposar quince o veinte minutos.
Formamos bolitas, las aplanamos, con el dedo les hacemos un agujero en el centro y vamos estirando hasta dejar las rosquillas del grosor deseado, teniendo en cuenta que al freírlas aumentan de volumen.
La masa resulta un poco pegajosa por lo que, si lo consideramos necesario, al formarlas podemos untar ligeramente la manos con aceite.
Las freímos en aceite de
oliva suave o girasol, que aromatizaremos friendo una piel de limón o naranja, a una
temperatura media-baja. Ya sobre la marcha vamos viendo, pues si está demasiado caliente
se tuestan por fuera y quedan crudas por dentro.
Cuando se enfríen podemos
ponerles, si nos gusta, azúcar glas.
mmm... ¡Que ricas con un buen café! bss
ResponderEliminarhttp://lasrecetasdenessa.blogspot.com.es/
http://lostrucosdenessa.blogspot.com.es/
Acabo de desayunar con ellas... jajaja
ResponderEliminarUn beso
para el cafetito de la tarde son perfectas!
ResponderEliminarGracias Espe, facilitas de hacer y ricas.
EliminarUn beso.