Ingredientes:
400 ml. de nata para montar
350 ml. de zumo de mandarina
130 grs. de azúcar
Ralladura de una mandarina
Pulpa de mandarina
Ponemos el jugo de mandarina con el azúcar al fuego hasta que hierva, lo retiramos le añadimos la ralladura y la pulpa de mandarina. Dejamos enfriar y cuando esté frío lo guardamos en la nevera.
La pulpa la aprovechamos de la que nos queda al hacer el zumo y la cantidad depende de nuestro gusto.
La nata siempre que se vaya a montar tiene que estar bien fría, la ponemos en un bol, la montamos hasta que esté firme.
Le añadimos el zumo poco a poco removiendo con cuidado para que no se baje mucho la nata y lo guardamos en el congelador. En una hora lo volvemos a batir para evitar que forme cristales, esta operación la repetimos cada hora, tres o cuatro veces más, hasta que esté cremoso y consistente.
Para servirlo lo retiramos diez minutos antes del congelador y si nos gusta le podemos poner un sirope de chocolate o chocolate caliente por encima.
Justo ahora que estamos en temporada!, lamentablemente viene con el invierno y no se antoja mucho un helado :(
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