Raxo es el nombre que recibe en gallego el lomo de cerdo.
Entre otras múltiples preparaciones una de las más
típicas, junto a la empanada de raxo, es el raxo con patatas.
No falta en los lugares de tapeo y siempre es bien
recibido por los comensales.
Su elaboración es sencilla aunque hay que hacerlo con
ciertas precauciones (freírlo a fuego bien fuerte, no pasarlo demasiado y hacerlo
en pequeñas cantidades) para que no se endurezca ni quede reseco.
Yo lo hago de la siguiente
manera:
3 dientes grandes de ajo
150 ml. de aceite de oliva
4 patatas Kennebec medianas
Una pizca de orégano
Sal
Limpiamos el trozo de lomo
de grasa y de nervios, lo cortamos en dados, le añadimos el zumo de limón, los
ajos picaditos y el orégano. Guardamos en la nevera unas horas, o mejor de un
día para otro, para que coja bien el adobo.
En esta foto la carne que está adobada no es lomo, es solomillo que, aunque no es el verdadero raxo, también queda muy rico así preparado.
La única variación que le hice es ponerle un chorrito de vino blanco en el adobo.
Las patatas que más me
gustan, tanto para freír como para cocer, son las Kennebec. Las pelamos y
cortamos en bastoncitos, las freímos en aceite bien caliente hasta que queden
un poquito doradas y crujientes. Retiramos a un papel absorbente y salamos.
Ponemos el aceite en una
sartén, cuando está bien caliente echamos el raxo en pequeñas cantidades,
solamente que cubra el fondo de la sartén pero sin amontonarse, para que se
selle bien y no se desjugue, lo dejamos extendido en el fondo de la sartén y
esperamos hasta que empiece a dorarse, entonces le damos vueltas durante un par de minutos para que se haga por todas partes. Que no se pase demasiado pues se endurece.
Lo retiramos a un
recipiente y conservamos en el horno caliente mientras en el mismo aceite freímos otra sartenada. Si preferimos, en lugar de conservarlo caliente en el horno, lo dejamos a temperatura ambiente y cuando hagamos la última sartenada añadimos todo el que teníamos hecho anteriormente y le damos un golpe de calor fuerte a todo junto.
Le ponemos la sal, lo
removemos y echamos encima de las patatas fritas.
Y no hay mejor acompañamiento que unos
verdaderos pimientos de Padrón.
En lugar de patatas fritas
también está tanto o más rico con cachelos.
Ummmm que buena pinta tiene Rosmaria, y a esta hora.....
ResponderEliminarBesos.
Es una de las tapas "insignia" en La Coruña. Hay lugares que se dedican casi exclusivamente a prepararlo.
ResponderEliminarMe alegro de que te guste.
Un beso
Hola Rosmaria,este raxo o lomo esta de muerte,este domingo le he dicho a mi marido que le voy a dar una sorpresa y lo voy a preparar,igual que tu, con sus pimientos,sus patatitas y su raxo encima y voy a quedar como una reina..jajaja.Muchos besitos preciosa
ResponderEliminarQue triunfes con él, jajajaja... es sencillo y rico.
ResponderEliminarUn beso