Ingredientes:
400 grs. de pechuga de pollo
½ cebolla mediana
½ puerro picado
2 dientes de ajo
6 cucharadas de aceite
Harina para rebozar el pollo
Cúrcuma
Pimienta blanca
½ vaso de vino blanco
½ litro de caldo de pollo
300 grs. de guisantes congelados
2 patatas grandes cortadas en dados
Con antelación de 24 horas ponemos las patatas a remojo cortadas en dados y cambiando el agua varias veces.
Pondremos el puerro y la cebolla muy picados a remojo cuatro horas antes a no ser que ya los tengamos remojados y congelados.
Cortamos la pechuga en trozos medianos, los pasamos por harina y los doramos bien en una olla con las seis cucharadas de aceite.
Cuando esté dorado el pollo por todas partes añadimos la cebolla el puerro y el ajo y los vamos pochando lentamente junto al pollo. Cuando empiecen a ablandar y sin que cojan color incorporamos el vino, el caldo, la pimienta y la cúrcuma.
Cocinamos a fuego lento. Mientras se cocina el pollo ponemos los guisantes a cocer en abundante agua fría, a los diez minutos los retiramos, escurrimos y reservamos. Cuando el pollo está tierno y la salsa reducida añadimos los guisantes y dejamos cocinar un par de minutos todo junto.
Cocemos las patatas en agua fría, a los diez minutos las retiramos con una espumadera y las echamos a freír en aceite caliente hasta que estén en su punto. Retiramos sobre papel absorbente.
Servimos el pollo acompañado de las patatas.
Gracias por tu receta. Hace poco que sigo este régimen y estoy escasa de ideas. Este fin de semana me estoy pegando un poco de paliza a preparar congelados como aconsejas.
ResponderEliminarPoco a poco te resultará más fácil cocinar para esta dieta tan complicada, pero la verdad a mí, congelando los básicos que se utilizan en muchos platos, la labor se me facilita bastante. Al principio estaba muy agobiada.
EliminarUn saludo