Le sacamos las espinas y telillas al cazón, lo cortamos en trocitos de bocado.
Si queremos que el adobo nos quede más suave, antes de pasarlo por harina, lo enjuagamos bajo el grifo y lo secamos bien.
Ingredientes:
2 kg. de bonito del Norte
3 vasos de aceite de oliva
1 vaso de vinagre de vino
2 hojas de laurel
1 cucharadita de pimentón
Media cucharadita de pimienta negra en grano
4 clavos
2 dientes de ajo troceados (optativo)
2 cebollas cortadas en juliana gruesa (optativo)
1 zanahoria en rodajas (optativo)
Sal
Sacamos la piel y las espinas al bonito, lo salamos y lo cortamos en trozos del tamaño deseado.
Ponemos el aceite en una sartén y lo sofreímos ligeramente, lo retiramos y en ese mismo aceite ponemos la cebolla, la zanahoria y el ajo, lo dejamos hacer tres o cuatro minutos sin dejar que tome color y añadimos el pimentón dulce, el vinagre, el laurel, los clavos, la sal y la pimienta.
Dejamos que hierva y retiramos.
Echamos como dos dedos de aceite del escabeche en los tarros, introducimos el bonito, le ponemos un poco de cebolla y acabamos de llenar con el escabeche de la sartén. Dejamos reposar un rato para que se asiente el bonito y si es preciso ponemos un poco más de aceite para que quede cubierto.
Esta es la manera más tradicional de hacerlo, pero yo hoy por comodidad puse el bonito en crudo y al aceite no le puse nada de verduras. Solamente el vinagre, el pimentón y las especias.
Cerramos bien los tarros y los cocemos dos horas al baño de maría.
Dejamos enfriar y guardamos en la despensa.
Debemos esperar como mínimo un mes antes de utilizarlo para que coja bien el sabor del escabeche.